Sábado IV Semana de Cuaresma
«Nadie nunca habló como Él»
📘 Primera Lectura: Libro de Jeremías 11, 18-20
Y yo era como un manso cordero, llevado al matadero, sin saber que ellos urdían contra mí sus maquinaciones: «¡Destruyamos el árbol mientras tiene savia, arranquémoslo de la tierra de los vivientes, y que nadie se acuerde más de su nombre!».
Señor de los ejércitos, que juzgas con justicia, que sondeas las entrañas y los corazones, ¡que yo vea tu venganza contra ellos, porque a ti he confiado mi causa!
📗 Salmo: 7, 2-3.9bc-10.11-12
Señor, Dios mío, en ti me refugio:
sálvame de todos los que me persiguen;
líbrame, para que nadie pueda atraparme
como un león, que destroza sin remedio.
Júzgame, Señor, conforme a mi justicia
y de acuerdo con mi integridad.
¡Que se acabe la maldad de los impíos!
Tú que sondeas las mentes y los corazones,
tú que eres un Dios justo, apoya al inocente.
Mi escudo es el Dios Altísimo,
que salva a los rectos de corazón.
Dios es un Juez justo
y puede irritarse en cualquier momento.
📖 Evangelio San Juan 7, 40-53
40 Algunas personas de la multitud que escucharon estas palabras decían: “¡De verdad, este hombre es el Profeta!” 41 Otros decían: “¡Es el Mesías!” Sin embargo, otras personas se preguntaban: ¿Pero vendrá el Mesías de Galilea? 42 ¿Acaso no dice la Escritura que el Mesías vendrá de la descendencia de David y nacerá en Belén, de donde era David?”
43 De tal manera que la gente no se ponía de acuerdo a causa de Él, 44 y a pesar que algunos querían arrestar a Jesús, nadie se atrevía a echarle mano.
45 Los guardias del Templo regresaron al lugar donde estaban los principales sacerdotes y los fariseos, y éstos les preguntaron: “¿Por qué no trajeron a ese hombre?
46 Los guardias respondieron: “¡Nadie nunca habló como Él!”
47 Entonces los fariseos dijeron a los guardias: “¿También ustedes han sido engañados? 48 ¿Alguno de los principales sacerdotes o de los fariseos habrá creído en Él? 49 Pero esta gente que no conoce la Ley es maldecida por Dios”.
50 Pero Nicodemo, que era uno de ellos y que fue al principio donde Jesús, les dijo: 51 “De acuerdo con nuestra Ley, no podemos condenar a un hombre sin escucharlo primero y descubrir lo que ha hecho”.
52 Ellos le respondieron: “¿Eres por casualidad también de Galilea? Estudia y verás que ningún profeta sale de Galilea”.
53 Cada uno regresó a su casa
TRADUCCIÓN DEL NUEVO EVANGELIZADOR
😇Palabra del Señor