Lunes XXXIV Semana del Tiempo Ordinario
«Dio más que todos»
📘 Primera Lectura: Apocalipsis 14, 1-3.4b-5
Yo, Juan, vi al Cordero que estaba de pie sobre el monte Sión, acompañado de ciento cuarenta y cuatro mil elegidos, que tenían escrito en la frente el nombre del Cordero y de su Padre.
Oí entonces una voz que venía del cielo, semejante al estrépito de un torrente y al ruido de un fuerte trueno, y esa voz era como un concierto de arpas:
los elegidos cantaban un canto nuevo delante del trono de Dios, y delante de los cuatro Seres Vivientes y de los Ancianos. Y nadie podía aprender este himno, sino los ciento cuarenta y cuatro mil que habían sido rescatados de la tierra.
Ellos siguen al Cordero donde quiera que vaya. Han sido los primeros hombres rescatados para Dios y para el Cordero.
En su boca nunca hubo mentira y son inmaculados.
Oí entonces una voz que venía del cielo, semejante al estrépito de un torrente y al ruido de un fuerte trueno, y esa voz era como un concierto de arpas:
los elegidos cantaban un canto nuevo delante del trono de Dios, y delante de los cuatro Seres Vivientes y de los Ancianos. Y nadie podía aprender este himno, sino los ciento cuarenta y cuatro mil que habían sido rescatados de la tierra.
Ellos siguen al Cordero donde quiera que vaya. Han sido los primeros hombres rescatados para Dios y para el Cordero.
En su boca nunca hubo mentira y son inmaculados.
Salmo 24(23), 1-2.3-4ab.5-6
Del Señor es la tierra y todo lo que hay en ella,
el mundo y todos sus habitantes,
porque El la fundó sobre los mares,
Él la afirmó sobre las corrientes del océano. ¿Quién podrá subir a la Montaña del Señor
y permanecer en su recinto sagrado?
El que tiene las manos limpias
y puro el corazón; él recibirá la bendición del Señor,
la recompensa de Dios, su Salvador.
Así son los que buscan al Señor,
los que buscan tu rostro, Dios de Jacob.
el mundo y todos sus habitantes,
porque El la fundó sobre los mares,
Él la afirmó sobre las corrientes del océano. ¿Quién podrá subir a la Montaña del Señor
y permanecer en su recinto sagrado?
El que tiene las manos limpias
y puro el corazón; él recibirá la bendición del Señor,
la recompensa de Dios, su Salvador.
Así son los que buscan al Señor,
los que buscan tu rostro, Dios de Jacob.
📖 Evangelio según San Lucas 21, 1-4
1 Estando en el patio del Templo, Jesús, levantando los ojos, vio a los ricos poniendo dinero en la caja de las ofrendas. 2 Vio también a una viuda muy pobre, que puso dos monedas de poco valor allí. 3 Luego dijo: “Les digo ciertamente que esta viuda pobre dio más que todos, 4 porque los otros dieron de lo que les sobraba, pero ella, de su pobreza dio todo lo que tenía para vivir”.
TRADUCCIÓN DEL NUEVO EVANGELIZADOR
😇Palabra del Señor