Miércoles XVI Semana del Tiempo Ordinario
«El que tiene oídos que oiga»
📘 Primera Lectura: Jeremías 1, 1.4-10
La palabra del Señor llegó a mí en estos términos:
«Antes de formarte en el vientre materno, yo te conocía; antes de que salieras del seno, yo te había consagrado, te había constituido profeta para las naciones».
Yo respondí: «¡Ah, Señor! Mira que no sé hablar, porque soy demasiado joven».
El Señor me dijo: «No digas: ‘Soy demasiado joven’, porque tú irás adonde yo te envíe y dirás todo lo que yo te ordene.
No temas delante de ellos, porque yo estoy contigo para librarte -oráculo del Señor-«.
El Señor extendió su mano, tocó mi boca y me dijo: «Yo pongo mis palabras en tu boca.
Yo te establezco en este día sobre las naciones y sobre los reinos, para arrancar y derribar, para perder y demoler, para edificar y plantar».
📗 Salmo: 71(70), 1-2.3-4a.5-6ab.15ab.17
¡que nunca tenga que avergonzarme!
Por tu justicia, líbrame y rescátame,
inclina tu oído hacia mí, y sálvame.
Sé para mí una roca protectora,
tú que decidiste venir siempre en mi ayuda,
porque tú eres mi Roca y mi fortaleza.
¡Líbrame, Dios mío, de las manos del impío!
Porque tú, Señor, eres mi esperanza
y mi seguridad desde mi juventud.
En ti me apoyé desde las entrañas de mi madre;
desde el seno materno fuiste mi protector.
Mi boca anunciará incesantemente
tus actos de justicia y salvación,
Dios mío, tú me enseñaste desde mi juventud,
y hasta hoy he narrado tus maravillas.
📖 Evangelio según San Mateo 13, 1-9
1 Aquel día, Jesús salió de la casa, se sentó junto a la orilla del lago, 2 y se le acercó a su alrededor, una gran multitud, de manera que se metió en una barca para sentarse; y la multitud estaba de pie en la playa. 3 Jesús les hablaba muchas cosas en parábolas, diciéndoles:
“He aquí que un sembrador salió a sembrar. 4 Cuando estaba esparciendo las semillas, algunas cayeron al costado del camino y las aves vinieron y se comieron todo. 5 Otra parte de las semillas cayó en un lugar donde había muchas piedras y poca tierra. Las semillas brotaron rápidamente porque el suelo no era profundo, 6 pero cuando salió el sol, quemó las plantas y se secaron porque no tenían raíces. 7 Otras semillas cayeron entre las espinas, que crecieron y ahogaron las plantas. 8 Pero una parte de las semillas cayó en buena tierra y produjo fruto, sobre la base de ciento, sesenta y treinta granos por semilla. 9 El que tiene oídos que oiga.
TRADUCCIÓN DEL NUEVO EVANGELIZADOR
😇Palabra del Señor