El tema de la flagelación de Jesucristo en Semana Santa, es un tema que siempre llama la atención.
Azotados como Cristo por males entre nosotros, por el coronavirus; es un mal que nos golpea. Sin embargo, igual que Jesucristo, no tememos. El sufrió los azotes y no tememos porque Jesucristo salió triunfante de en medio de todos esos tormentos y Él hoy nos alienta, nos anima y podemos decir también nosotros: ¡somos flagelados, azotados por el coronavirus, pero saldremos triunfantes y resucitaremos!
Hasta mañana si Dios usted y yo lo queremos.
Fuente: Mons. Ramón de la Rosa