Martes V Semana de Cuaresma
Solemnidad de San José, esposo de la Virgen María
«No tengas miedo»
📖 Primera Lectura: Segundo Libro de Samuel 7, 4-5a.12-14a.16
«Ve a decirle a mi servidor David: Así habla el Señor:
Cuando hayas llegado al término de tus días y vayas a descansar con tus padres, yo elevaré después de ti a uno de tus descendientes, a uno que saldrá de tus entrañas, y afianzaré su realeza.
El edificará una casa para mi Nombre, y yo afianzaré para siempre su trono real.
Seré un padre para él, y él será para mí un hijo.
Tu casa y tu reino durarán eternamente delante de mí, y su trono será estable para siempre.»
📖 Salmo 89(88), 2-3.4-5.27.29
proclamaré tu fidelidad por todas las generaciones.
Porque tú has dicho:
«Mi amor se mantendrá eternamente,mi fidelidad está afianzada en el cielo.»Yo sellé una alianza con mi elegido,
hice este juramento a David, mi servidor:
«Estableceré tu descendencia para siempre,mantendré tu trono por todas las generaciones.»El me dirá: «Tú eres mi padre,
mi Dios, mi Roca salvadora.»
Le aseguraré mi amor eternamente,y mi alianza será estable para él.
Carta de San Pablo a los Romanos 4, 13.16-18.22
Hermanos:
En efecto, la promesa de recibir el mundo en herencia, hecha a Abraham y a su posteridad, no le fue concedida en virtud de la Ley, sino por la justicia que procede de la fe.
Por eso, la herencia se obtiene por medio de la fe, a fin de que esa herencia sea gratuita y la promesa quede asegurada para todos los descendientes de Abraham, no sólo los que lo son por la Ley, sino también los que lo son por la fe. Porque él es nuestro padre común,
como dice la Escritura: Te he constituido padre de muchas naciones. Abraham es nuestro padre a los ojos de aquel en quien creyó: el Dios que da vida a los muertos y llama a la existencia a las cosas que no existen.
Esperando contra toda esperanza, Abraham creyó y llegó a ser padre de muchas naciones, como se le había anunciado: Así será tu descendencia.
Por eso, la fe le fue tenida en cuenta para su justificación.
📖 Evangelio según Mateo 1, 16.18-21.24a
16 Jacob procreó a José, el esposo de María la madre de Jesús, llamado el Mesías.
18 El nacimiento de Jesucristo fue así: María, su madre, estaba comprometida con José, pero antes de que vivieran juntos quedó embarazada por medio de la obra del Espíritu Santo. 19 José, con quien María se iba a casar, era un hombre que siempre hacía lo correcto. Él no quería avergonzar públicamente a María y decidió romper el contrato de matrimonio secretamente. 20 Mientras José pensaba en esto, un ángel del Señor se le apareció en un sueño y le dijo: “José, descendiente de David, no tengas miedo de recibir a María como tu esposa, porque ella está embarazada por obra del Espíritu Santo. 21 Ella tendrá un niño, y lo llamarás Jesús, porque Él salvará a su pueblo de sus pecados”.
24 Cuando José despertó, hizo lo que el ángel del Señor le ordenó y recibió a María como su esposa.
TRADUCCIÓN DEL NUEVO EVANGELIZADOR
😇Palabra del Señor