Sábado XXVI Semana del Tiempo Ordinario
«¡Felices las personas que pueden ver lo que ustedes están viendo!»
📘 Lectura libro de Baruc 4, 5-12.27-29
Ustedes fueron vendidos a las naciones, pero no para ser aniquilados; es por haber excitado la ira de Dios, que fueron entregados a sus enemigos.
Ustedes irritaron a su Creador, ofreciendo sacrificios a los demonios y no a Dios;
olvidaron al Dios, eterno, el que los sustenta, y entristecieron a Jerusalén, la que los crió.
Porque ella, al ver que la ira del Señor se desencadenaba contra ustedes, exclamó: «Escuchen, ciudades vecinas de Sión: Dios me ha enviado un gran dolor.
Yo he visto el cautiverio que el Eterno infligió a mis hijos y a mis hijas.
Yo los había criado gozosamente y los dejé partir con lágrimas y dolor.
Que nadie se alegre al verme viuda y abandonada por muchos. Estoy desolada por los pecados de mis hijos, porque se desviaron de la Ley de Dios:
¡Animo, hijos, clamen a Dios, porque aquel que los castigó se acordará de ustedes!
Ya que el único pensamiento de ustedes ha sido apartarse de Dios, una vez convertidos, búsquenlo con un empeño diez veces mayor.
Porque el que atrajo sobre ustedes estos males les traerá, junto con su salvación, la eterna alegría».
📗 Salmo 69(68), 33-35.36-37
que vivan los que buscan al Señor:
porque el Señor escucha a los pobres
y no desprecia a sus cautivos. Que lo alaben el cielo, la tierra y el mar,
y todos los seres que se mueven en ellos;
porque el Señor salvará a Sión
y volverá a edificar las ciudades de Judá: el linaje de sus servidores la tendrá como herencia,
y los que aman su nombre morarán en ella.
📖 Evangelio según San Lucas 10, 17-24
17 Los setenta y dos volvieron muy alegres y le dijeron a Jesús:
“¡Incluso los demonios nos obedecieron por el poder de tu nombre!”
18 Jesús les dijo:
“De hecho, veía a Satanás caer del cielo como un rayo. 19 Ahora les he dado el poder de pisar serpientes, escorpiones y sobre todo el poder de vencer el enemigo sin sufrir ningún daño. 20 Pero no se pongan felices porque los espíritus malignos les obedecen, sino alégrense porque el nombre de cada uno de ustedes está escrito en los cielos”.
21 En ese momento, por el Espíritu Santo, Jesús estaba muy feliz y dijo:
“Oh Padre, Señor del cielo y de la tierra, te alabo porque le has escondido estas cosas a los sabios e instruidos y se las has revelado a las personas que son como niños. Sí, oh Padre, porque así te agradó hacer esto”.
22 “Mi padre me entregó todas las cosas. Nadie conoce quién es el Hijo, excepto el Padre, y nadie sabe quién es el Padre, excepto el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar”.
23 Entonces Jesús se volvió hacia los discípulos y les dijo solo a ellos:
“¡Felices las personas que pueden ver lo que ustedes están viendo! 24 Les digo que a muchos profetas y reyes les hubiera gustado haber visto lo que ustedes están viendo, pero no pudieron; y les hubiera gustado escuchar lo que ustedes están escuchando, pero no lo escucharon”.
TRADUCCIÓN DEL NUEVO EVANGELIZADOR
😇Palabra del Señor